Desde siempre, al enebro se le han atribuido distintas propiedades medicinales. Ya los indios norteamericanos lo utilizaban como hierba medicinal para tratar infecciones del conducto urinario y también la diabetes. En otras latitudes se le han atribuido propiedades diuréticas, antisépticas y de estimulación de los jugos gástricos y las glándulas endocrinas.

Fue precisamente debido a sus múltiples usos medicinales, que el médico alemán Franciscus Sylvius, utilizó bayas de enebro en la elaboración de un brebaje para combatir los cálculos biliares y las afecciones renales que daría origen a la Ginebra, la cual ganó popularidad en Holanda con el nombre de Genever. Sería tiempo después cuando los ingleses la rebautizarían como Gin.

Esa ginebra original era ya una versión muy similar a la que consumimos hoy en día: alcohol fermentado a base de cebada y centeno, aromatizado con bayas de enebro. 

En el apartado gastronómico, el enebro se ha utilizado y utiliza sobre todo en adobos y la maceración de carnes, especialmente las de caza: cerdo o cordero. Además, es un ingrediente esencial en la elaboración del famoso chucrut.

Una curiosidad! Así como la ginebra nació como un producto medicinal, lo mismo ocurrió con su aplicación más famosa: el gin tonic. Una de las versiones que existe sobre la creación del popular cóctel cuenta que allá por 1783, la compañía Cadbury Schweppes creó un remedio para la malaria que aquejaba con severidad a las tropas inglesas que habían invadido la India. El invento era la tónica, básicamente agua con quinina. Ocurría que la bebida en cuestión era horriblemente amarga, así que los soldados ingleses la mezclaron con ginebra para hacerla más llevadera.

Para elaborar un Enebro Gin Tonic sobresaliente no necesitas una gran técnica pero sí realizar la preparación con atención. A continuación te mostramos la receta básica para saber cómo prepararlo.

Ingredientes:

• 2 bayas de enebro
• Ginebra tipo London Dry
• Tónica
• Hielo
• Una rodaja de limón

Herramientas:

• Copa de balón
• Jigger o medidor
• Cuchara trenzada

Para elaborar este combinado llena tu copa de balón con hielo abundante y sirve después una medida de ginebra con el jigger, el cual te proporcionará la cantidad perfecta de ginebra para tu copa.

A continuación, decanta la tónica sobre la cuchara trenzada, haciendo que se deslice sobre la parte inferior de esta y caiga lentamente en la copa, mezclándose con la ginebra, para que no se pierda el toque de las burbujas de la tónica.

Una vez hecha la mezcla, toma las dos bayas de enebro, aplástalas ligeramente y déjalas caer dentro de la copa. Luego, añade la rodaja de limón y ya tienes listo tu Gin Tonic!

Las bayas de enebro aportarán al trago un toque amargo, con matices dulces a tu copa, haciéndola más refrescante.