Oriundo de tierras niponas, este té puede traducir su nombre en “té cocido”, debido a su proceso de producción único en el mundo, como el té sin par, que es su resultado. Es el más bebido en Japón, combina una larga lista de beneficios naturales para la salud, con un exquisito periplo por el paladar, que comienza y termina en el mar.

Entre sus destellos dulces, se descubren algas y frutales; luego, su típica astringencia nos brinda leves notas marinas y amargas, propias de éste té.

Para su preparación, recomendamos infusionar 2 gr de té por taza, a 80ºC, por el lapso de uno o dos minutos; consiguiendo de esta manera hasta cuatro o cinco infusiones para ese mismo grupo de hebras.

Puede bebérselo frío.